Será la primera vez que el Madrid lleva en su camiseta esta imagen, que se instauró en la temporada 17-18. Hasta la fecha, sólo el Barcelona lo había lucido. En el Coliseum, hasta tres manos a mano se fueron al limbo y eso ante los grandes, cómo se vio ante el PSG o el Barcelona, se paga. Marcó tres ante el Getafe, sí, pero dos a balón parado y perdonó un buen puñado de ocasiones claras. Con la pelota, su dinamismo ofrece siempre al equipo un la salida rápida de balón. Kovacic es el escudero de Luka Modric en la medular, la locomotora de Croacia, el futbolista que auxilia a todos sus compañeros con y sin balón. De hecho, hasta el tanto de Modric en el 95′, tras una gran contra, el Madrid prácticamente sumaba cuatro encuentros completos sin marcar un gol de jugada. El Madrid le dio una oportunidad pero Benítez no le dio oportunidades hasta el episodio del Carranza. Tims que describe los primeros pasos de un equipo que tiene el apodo de The Club por su carácter precursor y su decisiva influencia en el desarrollo del fútbol. Al ruso le costó hacerse importante en el Castilla, tanto que subió muy joven y le bajaron al Madrid C. Ahí maduró y aprendió el otro fútbol.
Voló para sacar una volea de Arambarri que olía a gol desde que el medio impactó con el balón, hizo un milagro para despejar un remate de cabeza de Cabrera y se lanzó junto al palo para mandar a córner el remate de Fajr. El lanzamiento de Juanfran al palo y los cinco aciertos de los madridistas le dieron la Undécima al club de Chamartín y dejaron sin revancha ni consuelo a los rojiblancos. La pandemia lo paró todo y obligó en Inglaterra a dar por canceladas las Ligas semiprofesionales -por debajo de Sexta-, afectando a un club único. Antes de irse le dio tiempo a debutar y marcar dos goles en 18′. Debe ser récord en la historia del club. Eclosionó en la segunda, la 15-16, con 25 goles. Tres temporadas en Segunda, de menos a más, para acabar fichando por el Rayo en su bautismo en LaLiga. Luis Enrique ni mucho menos le ha cerrado las puertas de la selección y seguro que en la cabeza de Sergio está volver. En el campo no se encontrará a jugadores del Real Madrid, ausentes en la lista de Luis Enrique, pero sí a compañeros y ex como Azpilicueta y Álvaro Morata.
El croata tiene una gran relación con su capitán en el equipo inglés y durante su estancia en el Madrid, además de estar muy vinculado a su compañero croata, hizo muy buenas migas con los jóvenes que habían pasado por la cantera, como Álvaro Morata o Lucas Vázquez. El origen del Sheffield FC se pierde en 1857. «El equipo se fundó hace 162 años cuando Nathaniel Creswick y William Prest, aficionados al críquet, buscaban un deporte para mantenerse en forma durante el invierno. Habían jugado varios partidos de fútbol en la Universidad y cogieron algunas de las reglas como base para otras nuevas creando las Sheffield Rules, que fueron las primeras leyes del fútbol adoptadas por otros conjuntos», explica el presidente. El fútbol fue uno de los primeros sectores en sufrir los síntomas del coronavirus. La más significativa es la ancha banda azul marino en uno de los bordes del cuello, que se prolonga más allá de la unión con el borde del lado izquierdo, un borde más fino que va en color blanco. Tres paradones en la primera parte, espectacular su vuelo para despejar la volea de Arambarri, empezaron a inclinar la victoria hacia el lado madridista, con hambre de Liga, la competición preferida de Zizou.
Tres paradones en la primera parte permitieron al equipo blanco llegar con vida al descanso. Barça presumía de cantera pero de todos los canteranos que subió Guardiola el único que sigue en el equipo es Busquets. Después entrenó al Barça. Ha encajado el equipo, es más sólido, robusto y juega mejor al fútbol. Santiago Bernabéu da nombre además al estadio, bautizado así en honor al presidente que dio el impulso definitivo al club, alcanzando las más altas cotas de éxito en el momento decisivo de expansión del fútbol a nivel mundial y también como negocio. En verano de 2009 Florentino Pérez regresó a la presidencia del Real Madrid y lo hizo a lo grande. Otro campeón de 2010 (marcó en la final) que se coció a fuego lento en el Madrid C, pasando de puntillas por el Castilla hasta la 13-14, en la que en Segunda jugó 17 partidos, pero sólo 440 minutos. Tras varios años en el Willem II, donde fue uno de los mejores delanteros de la Eredivisie e ídolo total de la afición, ahora lleva sus goles hasta Ucrania. Fue pasando por filiales de Segunda B (Getafe B, Almería B y Atlético B) hasta recalar en el Huesca, donde cogió carrerilla hasta destacar en la 16-17 con 12 goles.
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